Bien entrada la noche, una noche silenciosa, el espíritu puede estar más despierto y lucido que nunca. El gran vacío que existe alrededor, el alma está cargada de energía, pero tranquila como la superficie de un lago. En ese instante, toda la felicidad es posible.
Luis Carlos Lisboa.
Qué belleza Candil.
ResponderEliminarDe imágenes y de texto.
Me has recordado mi infancia.
Un abrazo.
Según lo dices... puede que sí!
ResponderEliminarLa fotografía fantástica.
Abrazos desde mi puerto.
Tu texto es muy bello y no exento de razón, Candil.
ResponderEliminarY la fotografía lo ilustra a la perfección.
Saludos.
Ese silencio de la noche y ese vacio que carga el alma de tranquilidad, como me gusta, me encantan esos momentos para mi los mejores del dia. Que bien los has descrito querido amigo preciosa foto. Un beso grande
ResponderEliminarVerdad que si toda la felicidad es posible! Preciosa foto preciosa reflexion.
ResponderEliminarBesos
Flor